¿Por qué un perro jamás debería comer huesos?

Como sabemos que el tema de la alimentación de las mascotas es una de las grandes preocupaciones de sus dueños, queremos seguir hablándote de alimentos que no puede tomar tu perro. Los huesos son uno de ello y, aunque esté en la lista de muchas notyicias, nosotros, como especialistas en la venta de pienso para perros barato, queremos dedicarle una sola entrada del blog para informarte adecuadamente del por qué.

En nuestro inconsciente asociamos rápidamente la imagen de un perro con un hueso. De hecho, muchos de los juguetes para perros y algunos de los snacks y galletas que más les gustan se fabrican con forma de hueso, pero quienes trabajamos en la venta de pienso para perros barato sabemos que es uno de los alimentos que más daño puede hacerles. Los huesos muy grandes, de vaca o cerdo, por ejemplo, además de desgastarles innecesariamente la dentadura, a corto plazo pueden ser causantes de estreñimiento, muchas veces muy doloroso para el animal.

Tampoco son buenos los huesos de pequeño tamaño. Entendamos que su estómago no puede digerirlos, de modo que una vez que el hueso ha recorrido todo el intestino llega el momento de salir, y como el ano tiene un tamaño mucho menor que su boca, lo que se tragó con tanta facilidad puede ser muy complicado de expulsar. Hemos tenido que intervenir a varios perros para extraerles huesos clavados del ano.

Pero si hablamos de operaciones, sin duda las más graves son las que provocan los huesos de ave. Cuando el perro los muerde, se fragmentan en trozos más pequeños que pueden tragarlos con cierta facilidad. El problema viene porque esos fragmentos tienen los bordes afilados como estiletes y pueden provocar heridas muy graves al llegar al estómago.

Olvídate de los tópicos y recuerda lo que te decimos en Pienso Express: Nunca le dejes comer huesos a tu perro.